Sardis: La iglesia muerta con reputación de estar viva

¿Qué pasaría si todo lo que tu das por hecho en realidad no fuese así? Imagina caminar en una dirección por muchos años solo para darte cuenta que estas en el rumbo equivocado. Uno de los primeros libros de la biblia que tuve la oportunidad de leer fueron los proverbios y precisamente uno de los primeros versos que memoricé está en ese libro

Hay camino que al hombre le parece derecho, pero al final es camino de muerte.

Prv 14.12

En esta ocasión debemos profundizar en la quinta carta a las iglesias en Apocalipsis y sobretodo en la confrontación que Jesús les da y es precisamente a la iglesia de Sardis, un mensaje que es muy duro pues Jesucristo se dirige precisamente a una iglesia que estaba muerta pero ella misma no lo sabía. Dicho en otras palabras Sardis se comportaba como una iglesia viva, cantaba como una iglesia viva, pensaba como una iglesia viva, se movía como una iglesia viva, hablaba como una iglesia viva, pero estaba completamente muerta a los ojos de Dios. Es por esa razón que titulamos a este blog SARDIS, LA IGLESIA MUERTA CON REPUTACIÓN DE ESTAR VIVA.

Escribe esta carta al ángel de la iglesia de Sardis. Este es el mensaje de aquél que tiene el Espíritu de Dios de siete aspectos y las siete estrellas:

»Yo sé todo lo que haces y que tienes la fama de estar vivo, pero estás muerto.  ¡Despierta! Fortalece lo poco que te queda, porque hasta lo que queda está a punto de morir. Veo que tus acciones no cumplen con los requisitos de mi Dios.  Vuelve a lo que escuchaste y creíste al principio, y retenlo con firmeza. Arrepiéntete y regresa a mí. Si no despiertas, vendré a ti de repente, cuando menos lo esperes, como lo hace un ladrón.

Sin embargo, hay algunos en la iglesia de Sardis que no se han manchado la ropa con maldad. Ellos caminarán conmigo vestidos de blanco, porque son dignos. Todos los que salgan vencedores serán vestidos de blanco. Nunca borraré sus nombres del libro de la vida, sino que anunciaré delante de mi Padre y de sus ángeles que ellos me pertenecen.

Todo el que tenga oídos para oír debe escuchar al Espíritu y entender lo que él dice a las iglesias.

Apocalipsis 3.1-6

Este mensaje realmente hay que tomarlo muy en cuenta. ¡Que trágico es pensar que nosotros podemos tener una familia, un matrimonio, una congregación en la cual damos por hecho que esta viva, pero ante los ojos de Dios no lo esta. Si nos ponemos a pensar en un matrimonio cristiano, en una familia cristiana, se supone que quien vive en ellos es Cristo. El quehacer en una iglesia es la vida de Dios en esta! ¡Que horrible es el pensar que es la iglesia el lugar donde el Dios vivo se manifiesta, donde cristianos se congregan adorando a un Dios vivo, cantándole alabanzas vivas, pero la iglesia misma estaba muerta! y lo más horrible es que mientras ellos pensaban que honraban a Dios con sus obras para el Creador estas obras estaban muertas.

Es por esa razón que nosotros debemos aprender mucho de esta carta a Sardis para no cometer los mismos pecados que ellos cometieron. Hoy en día podemos ver reflejadas las siete iglesias en nuestros tiempos, aquellas que reaccionan como Éfeso, como Esmirna, como Pérgamo, como Tiatira... y lamentablemente aquellas que están muertas sin saberlo como Sardis.

“Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: Esto dice el que tiene los siete espíritus de Dios y las siete estrellas”

Al referirse a las “siete estrellas” Jesús se presenta ante Sardis de la misma manera en que se presenta a la iglesia de Éfeso. Lo interesante de esta carta en particular es la descripción que le antecede a las estrellas. Los siete Espíritus. En todo el libro del apocalipsis nunca se vuelve a usar dicha descripción, de hecho es un tema complejo pues es muy dificil a que específicamente se esta refiriendo Jesús con ello porque hay dos pajases en la Biblia que hablan del Espíritu de Dios de manera distinta y pueda que se refiera tanto a uno como a otro.

Un ejemplo de ello está en Isaías 11:1-2

Y el Espíritu del Señor reposará sobre él:
    el Espíritu de sabiduría y de entendimiento,
el Espíritu de consejo y de poder,
    el Espíritu de conocimiento y de temor del Señor.

¿Significa esto que hay siete espíritus diferentes? De ninguna manera porque esta hablando de un solo Espíritu y de la plenitud de la deidad en este. Posiblemente Jesús en apocalipsis se refiera a este pasaje para hacerles ver que quien les está hablando tiene la esencia del Dios vivo. El otro pasaje se encuentra en Zacarías capítulo cuatro donde habla de la omnisciencia de Dios. Desconocemos el porqué se refirió de esa manera ante Sardis, pero lo que si podemos entender es que no importa a que pasaje se refiera en las escrituras es que ambos textos tienen un punto importante: Se esta hablando sobre un Espíritu que está vivo, que se mueve. Por lo tanto, a una iglesia que esta muerta Jesús se presenta como Aquel que vive y lo hace para poder contrastar ante los ojos de ellos la podredumbre y el pecado en el cual ellos se encontraban.

Toma en cuenta que las siete cartas a las iglesias fueron cartas reales, que tuvieron un remitente y un destinatario y que fueron leídas en la congregación. ¡Imagina cuando se leyó esta carta en la iglesia de Sardis!  ¡Imagina la expresión de su pastor y de sus ancianos y de la congregación cuando Jesús mismo les dijo que estaban muertos y no vivos!

El saludo que Jesucristo le hace a esta iglesia no solamente es una reprimenda sino una verdad de contraste. Les está diciendo que es un Dios vivo, que tiene un Espíritu vivo y que por lo tanto todas aquellas iglesias verdaderas tienen vida porque el Dios mismo mora en ellas. Por lo tanto, si en Sardis no mora aquel Espíritu vivo, no da manifestaciones de vida sencillamente esta muerta porque no se parece en nada al Cristo que la hizo nacer.

Conocemos poco de la iglesia de Sardis en si, se cree que fue fundada por el apóstol Pablo mientras este permaneció por tres años en la ciudad de Éfeso así que para el tiempo en que la carta fue redactada la iglesia posiblemente tenía cuarenta años de edad.

Sardis históricamente era una ciudad muy rica debido a que era muy antigua, la ciudad en sí fue fundada 1.200 años antes de Jesucristo. Fue tan famosa que llegó a ser la capital del reino de Libia. Se encontraba aproximadamente a unos cincuenta kilómetros de Tiatira y a diferencia de esta Sardis reposaba en lo alto de un monte a 1,500 metros sobre el nivel de mar. Su riqueza se debió a que su economía se basaba en la extracción de oro.

Al igual que cualquier ciudad importante Sardis tenía su propia manera de adoración a dioses paganos especialmente a Artemisa, comúnmente conocida como la Cibeles. La gente de la ciudad utilizaba un busto erigido a Galería Faustina quien años atrás fue emperadora de la ciudad y con el tiempo a esta imagen se le conocía como la madre del cielo o madre de dios y a los césares quienes también tenían su adoración eran conocidos como hijos de dios. Era por esa razón que comúnmente se esculpían imágenes de Galería Faustina con un manto y un niño en brazos.

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Sardis era una ciudad tan idólatra que tenían la creencia que estas imágenes tenían poderes curativos tan poderosos que incluso podían revivir los muertos. Esto es totalmente irónico porque en la ciudad se creían que los dioses paganos daban vida, y dentro de ella había una iglesia que adoraba al Dios vivo, pero la misma iglesia estaba muerta.

Fue por esa misma razón que Jesucristo comienza la carta de esta manera

Escribe esta carta al ángel de la iglesia de Sardis. Este es el mensaje de aquél que tiene el Espíritu de Dios de siete aspectos y las siete estrellas:

»Yo sé todo lo que haces y que tienes la fama de estar vivo, pero estás muerto.  

¿Por qué Jesús les dice a ellos que estan muertos? Porque realmente lo estaban. Aca se esta hablando que era una iglesia de inconversos. Cada vez que la biblia se refiere a una persona como “muerta” aunque esta viva fisicamente esta dando a entender que esta persona esta muerta espiritualmente en sus delitos y pecados. La carta a los romanos nos dice que la paga del pecado es la muerte y efesios 2.1 nos dice específicamente

“En cuantro a vosotros que estábais muertos en vuestros delitos y pecados”

Pablo se refiere a aquellas viudas que andan tras los placeres de este mundo de esta manera

“Pero la que se entrega a los placeres, viviendo está muerta”

 1 Timoteo 5.6

Antes que nosotros fuésemos llamados por Dios estabamos muertos espiritualmente. Un muerto no puede sentir, ni ver, ni palpar las cosas que le rodean. Pasó lo mismo con nosotros. Fue el Padre que con su amor entregó a Jesús para salvarnos y darnos vida en nuestro espíritu, y una vez vivos pudimos sentir, ver y testificar de Aquel que nos dio la vida.

La iglesia de Sardis llegó a su muerte por dos razones principales: Ellos no se cuidaron de los falsos maestros que desde el inicio estaban en las iglesias de Tiatira y Pérgamo quienes exparcieron sus herejías sobre toda la región y los miembros de Sardis con el transcurrir del tiempo comenzaron a creer en estas cosas. Ten en cuenta que una falsa enseñanza no es una mentira en sí sino una verdad a medias, estos falsos maestros adulteraban la buena nueva y la mezclaban con sus creencias y de esa manera engañaron a muchos. El problema de no confrontar las falsas enseñanzas es que con el tiempo estas llegan a convertirse en una tradición y la congregación ya no la cuestiona, simplemente la cree. Cuarenta años después de fundada la iglesia en Sardis estaba poblada completamente por personas que no habían nacido de nuevo.

Ellos hablan como cristianos, cantan como cristianos, predican como cristianos pero no son nacidos de nuevo, mas bien con el transcurrir del tiempo hicieron de sus deseos una doctrina, tolerándose ellos mismos y no cuestionando sus enseñanzas

Bien lo profetizó Jeremías acerca de estas personas que prefieren escuchar doctrinas de hombres

“Pues mi pueblo ha cometido dos maldades: Me ha abandonado a mí –la fuente de agua viva- y ha cavado para sí cisternas rotas ¡que jamás pueden retener agua!”

Jeremías 2.13

El problema con Sardis no es que ellos dejaran de creer en Dios. Ellos creían en Dios, le alababan, le cantaban; pero lo hacían a un Dios creado por ellos que con el transcurrir del tiempo y las generaciones fue pareciéndose menos al Dios de la biblia.

¿Acaso no es esto lo que está pasando en muchas iglesias y por lo cual ya comenzaron a morir? ¡Estamos llamando Cristo a un Dios que es permisivo, buena onda que solo es amor, que tolera mi pecado y al mismo tiempo llamamos religiosos a aquellas personas que reprenden nuestro gran error! ¡Y pensamos que Dios es así porque nosotros lo creamos de esa manera! ¿No es lo que Dios está tratando de decirnos? Hemos cambiado aquella agua viva que nos refresca, que nos purifica, que nos hace crecer espiritualmente y ¡la hemos cambiado por cisternas rotas que no retienen nada! Es que cuando una iglesia, una familia, un matrimonio dejan a esa agua viva que es Cristo inmediatamente se convierten en insensatos. Ya no hay sensatez en el hogar ni en el lugar donde te desenvuelves porque simplemente el autor de vida ya no esta… por esa razón Sardis estaba muerta.

La segunda razón por la que la iglesia en Sardis estaba muerta es que sus obras buscaban agradar al mundo y no a Dios. La iglesia en sí comenzó a buscar el visto bueno de aquellos que le rodeaban y lo lograron. Hoy en día se ve lo mismo. Estamos trayendo el mundo a la iglesia en lugar de ser lo contrario. Tú lo puedes ver en tu entorno: Si un ritmo de música secular se pone de moda casi de inmediato saldrá algún “cristiano” cantándole a Dios con el mismo ritmo. ¿Lo hacen para agradar a Dios? De ninguna manera. Lo hacen para atraer la mayor cantidad de personas que se pueda no importa de donde vengan.

Aun con todas estas cosas hay algo que me conmovió mucho. En medio de una iglesia que estaba muerta, sin esperanzas ni sueños había unas pocas personas, una minoría que retenía la verdadera doctrina. ¿Por qué leer una carta a una iglesia muerta? Precisamente  porque había en ella unos que aún estaban vivos, y el mensaje específicamente fue para ellos. El llamado de Jesús fue para retener lo que aprendieron desde un principio y hacerlo con firmeza. ¿No es tiempo que hagamos lo mismo? Volver a las raíces, a aquella sed de aprender aún más de la Palabra, de levantarnos temprano por la mañana para descubrir la voluntad de Dios en nuestro diario vivir.

“Sin embargo, hay algunos en la iglesia de Sardis que no se han manchado la ropa con maldad. Ellos caminarán conmigo vestidos de blanco porque son dignos. Todos los que salgan vencedores serán vestidos de blanco. Nunca borraré sus nombres del libro de la vida, sino que anunciaré delante de mi Padre y de sus ángeles que ellos me pertenecen”

Apocalipsis 3.4-5

Es tiempo que hagamos un alto en nuestra vida. Si estamos haciendo las cosas mal, creyendo en un Dios a nuestra manera Jesús nos invita a volver atrás y caminar a su lado. El mensaje a Sardis nos deja una lección muy importante que debemos tomarla por obra antes que sea demasiado tarde.